
No se si serás muy fan de los cortometrajes, pero Blinky™ merece mucho la pena.
En muchas ocasiones es cierto que los cotos abusan un poco de intensidad y de querer demostrar demasiadas cosas en muy poco tiempo.
Es lógico teniendo en cuenta que en muchas ocasiones los cortometrajes son obras noveles de personas que aspiran algún día hacer un largometraje y necesitan aumentar su portfolio para demostrar de lo que son capaces.
Aunque no siempre es así.
Sea como fuere hacer un corto no es nada fácil en contra de lo que se pueda pensar.
Y hacer uno como Blinky™ es una verdadera proeza.
De hecho hace ya varios años que lo ví por primera vez y desde entonces hasta hoy, todas las veces que lo he visto, (que no han sido pocas), me ha encantado.
¿Te apetece entrar a conocer al entrañable robot BlinkyTM?
Espero que sí.
Blinky™: El mejor corto de ciencia ficción.
Al menos es el que a mí más me ha gustado de los que he visto al respecto hasta el día de hoy.
Te dejo el vídeo que ha sido colgado en Youtube para que puedas disfrutar de éste gran corto.
Y no dejes de verlo hasta el final, que merece la pena. 😉
Por cierto, el video de Blinky está en inglés con subtítulos en español. Pero te aseguro que merece la pena verlo en versión original.
¿Por qué es Blinky™ un cortometraje tan bueno?
Atención que aquí empiezan los Spoilers. Antes de seguir leyendo te aconsejo que lo veas.
¿Qué te ha parecido? Chulo, ¿no?
Si te parece ordenamos un poco las razones por las que a mí Blinky™ me parece un corto magistral.
1. Trata el tema de la robótica desde un punto de vista serio.
El corto entra en el peliagudo tema de la domesticación de los robots.
A estas alturas del S XXI está clarísimo que esas máquinas ya hoy en día dominan y son un factor determinante de prácticamente toda la fabricación industrial. Y es cuestión de (poco) tiempo que lleguen a serlo también en nuestros hogares. darán el siguiente paso e irán entrando en nuestros hogares.
Ya existen brazos robóticos que son unos chefs estupendos o que limpian el suelo. Y dentro de poco veremos muchos más tipos de robots conviviendo con nosotros.
De hecho prometen hacer nuestras vidas mucho más fáciles.
¡Y las harán!… 🙂
Ahora bien, ese tipo de máquinas no dejan de ser eso, máquinas, les falta lo que algunos llaman «alma» y otros «inteligencia artificial«.
2. La inteligencia artificial como la piedra angular de la revolución robótica.
Tener un robot que te corte las patatas es útil, pero hay un problema, no a todos nos gustan las patatas de la misma forma todo el tiempo.
El gran cambio de paradigma consiste en tener máquinas que tengan la capacidad de aprender. Lo que se traduce en que sean capaces a las necesidades, gustos o caprichos de cada ser humano en cada situación particular.
¿No sería eso genial?
Evidentemente es infinitamente más complicado técnicamente pero no es inviable.
Piensa en Blinky™ , su razón de ser es hacer compañía a los niños, pero para ello tiene que amoldarse a las peculiaridades de cada uno y saber responder según sus expectativas de éste.
El problema viene cuando un algoritmo se enfrenta a respuestas emocionales complejas.
Entonces Blinky™ puede dejar de ser tan friendly como pensamos…
3. Mi robot no me comprende…
Los humanos somos entes biológicos maravillosos, pero no en los aspectos que tradicionalmente hemos creído.
Esto daría para mucho más pero hazte esta pregunta: ¿Qué capacidades hemos valorado más que ninguna otra durante nuestra historia?
Pues por un lado la memoria. De hecho casi todo el sistema educativo ha estado (y sigue estando) basado en exámenes que evalúan básicamente nuestra capacidad de retención de conceptos.
Y por otro nuestra capacidad de cáculo. Lo normal es que hasta que no llegas a un nivel universitario las matemáticas están basadas en hacer cuentas de mayor o menor complejidad.
¿Y sabes que? Esas dos habilidades son en realidad las que peor se nos da a los humanos.
Somos una verdadera calamidad en ello. 🙁
Y de hecho es precisamente lo que mejor se les da a las máquinas.
Calcula 142.232 elevado a 56 o recita todas las capitales del mundo. ¿Se entiende lo que digo?
En lo que realmente somos buenos es en hacer miles de operaciones mentales en paralelo.
Somos capaces de procesar mil inputs a la vez y eso a las máquinas les cuesta horrores.
Te pongo un ejemplo: Si estás hablando con un amigo puedes entender literalmente lo que está diciendo, pero todo el significado de su mensaje se puede ver alterado por sus rasgos faciales, la modulación de su voz o la contextualización de los sintagmas. Es el ejemplo de la ironía o el sarcasmo por ejemplo. Además podemos saber si nos está mintiendo por su lenguaje corporal, y un montón de factores más.
Es todo esto lo que es infinitamente complicado para una máquina.
Los robots todavía no son ni remotamente capaces de captar todas esos infinitos matices del comportamiento humano.
Y es precisamente eso lo que le pasa a Blinky™.
Mensajes contradictorios, señales emocionales, procesos en paralelo,….
¡¡¡Arrgh!!! ¡Fatal error! ¡Disfrute de la cena! 😮
4. Un final brutal de lo más inesperado.
Al menos para mí. ¿Tu te lo imaginabas?
Uno de los ingredientes de todo buen corto es precisamente un final a lo grande.
Y el final de Blinky™ no puede ser más impactante.
Parece mentira la de cosas que pasan por tu cabeza en 10 minutos y para mí el final es lo que hace que ya nunca se te olvide.
Bueno, pues hasta aquí mi recomendación de este genial corto.
Ahora te toca a tí. ¿Por qué no compartes lo que te ha parecido?.
I just want to be your friend… 🙁