Aunque parece que El Exorcista 2×03 es otro episodio insignificante, en realidad pasan cositas, y a mi por lo menos me ha parecido un episodio entretenido.
Tampoco es que haya sido antológico, pero bueno, tiene un par de cositas interesantes.
Aunque para ser honestos, sigo siendo bastante pesimista respecto a los derroteros que está tomando la temporada.
El Exorcista 2×03: un episodio preparatorio.
El Exorcista 2×03 también consta de tres partes como los anteriores.
1. Munchausen por poderes.
Los padres Tomás y Marcus llegan a casa de una niña que al parecer, está poseída.
Por cierto, yo creía que iban llegar a la casa de acogida, pero me equivoqué. Aunque no por mucho, porque resulta que viven en la misma isla que la pequeña.
Tomás sigue con el rollo de “yo soy el elegido” en plan Neo de Matrix, pero sin molar tanto. Y cómo cree que las visiones que tiene vienen directamente de Dios, pues decide pasar de Marcus y hacerle un exorcismo por su cuenta a la chica, sin tener pruebas de que esté poseída de verdad.
Al final resulta que no lo está y que la madre la ha estado drogando.
Total, que acepta que tiene mucho que aprender y que Marcus sabe más que los ratones coloraos.
Por cierto, estos dos se han cruzado con Rose, así que la llegada a la casa de horrores es inminente.
2. Ataque aviar severo.
Las cosas en la casa de acogida sigue bastante igual.
Cada niño con sus mierdas y todo eso.
Con la excepción de Shelby, que se ve que es capillita modo pro, y tiene una sensibilidad muy fuerte al mal.
Insiste en que hay algo malvado en la isla, y como no podría ser de otra forma, cosas raras empiezan a pasar.
No sabemos si a consecuencia de que Shelby rezara en el lago o no, pero lo cierto, es que de nuevo aparece otra megabandada de pájaros que se estrella a lo kamikaze contra la casa de los chicos.
Cero bajas, pero mucho susto. Sobre todo para la pequeña niña agorafóbica.
3. La sociedad del verdadero creyente.
Parece que Bennett no está solo.
De hecho, esta trama es la que más me ha interesado en El Exorcista 2×03. No tiene desperdicio.
Empieza con el obispo nazi ese celebrando uno de los cónclaves chungos de posesión, y tal como empieza, una chica desconocida se carga a todos los demoníacos comensales.
Se ve que la chica forma parte de alguna sociedad hermética de verdaderos combatientes a Satanás.
Mola.
Y mola más cuando se pone en contacto con el padre Bennett y le ofrece presentarle a su fuente.
Pues resulta que su fuente es una exorcista (¿existen exorcistas mujeres en la Iglesia del mundo real?) a la que han poseído, y tiene ese tercera pupila tan desagradable.
Así que no es que estén matando a los exorcistas, es que los están poseyendo.
Bastante paradójico.
Y hasta aquí El Exorcista 2×03. ¿A tí que te ha parecido? ¿Te ha gustado?
Gracias por leer.