Así es. Con el último episodio de la tercera temporada se acabó la serie de Hannibal, sin duda una de las series más controvertidas del panorama televisivo actual.
A grandes rasgos, y antes de profundizar un poco más, tengo que decir que en general me ha gustado, y aunque no soy el mayor aficionado del género policiaco es de justicia reconocer que la serie Hannibal reposa sobre unos cimientos suficientemente estables.
Así que vamos allá no sin antes admitir que lo que pasó tanto en la primera como en la segunda temporada lo tengo un poco nubloso por el paso del tiempo y como por aquel entonces no había nacido todavía Ocio 3.0 no puedo dar un vistazo a mis impresiones de antaño.
Por cierto, casi se me olvidaba, como es costumbre te dejo un pequeño vídeo por si te apetece refrescar neuronas o hacerte una idea de lo que viene siendo la serie basada en el famoso Hannibal el Canibal.
¿Merece la pena ver la serie Hannibal?
Bueno, como siempre depende de tus gustos, claro. Pero si te gustan las series policíacas y tienes un estómago resistente a prueba de sangre y vísceras (lo de Hannibal el Canibal no es valadí) no es una mala opción en absoluto.
Ten en cuenta que no es una serie al estilo de Forever, CSI, o similares. Hannibal va sobre asesinatos a lo brutal, desagradables hasta las trancas y donde no cabe una pizca de clemencia o candidez , o sea, lo que viene siendo la obra y milagros de las mentes, perturbadas o no, de abyectos psicópatas.
¿Te sigue interesando? Pues entonces empiézala.
Hannibal es una buena serie con un sólido argumento y grandes actores que sin duda pocas veces te dejarán indiferentes.
Se supone que la serie está basada en la novela «El dragón rojo» de Thomas Harris y publicada en 1981, sobre la cual se rodó la novela homónima en 2002 protagonizada por Edward Norton y Anthony Hopkins (sobre la cual tengo un leve recuerdo, así que volveré a verla en breve), pero no se hasta que punto la serie se asemeja a la novela.
También existe la película «Hannibal: el origen del mal«, del 2007 la cual no he visto todavía y también la tengo pendiente (hay que ver que en estos tiempos modernos no da uno a basto, casi que se echa de menos la época en la que se veía 15 veces la cinta de los Goonies).
Sea como fuere, Hannibal es una serie diferente, despiadada, cruel y dura, pero también interesante y muy trabajada.
Por supuesto tiene partes mejores y peores, y la tercera temporada es totalmente diferente a las otras dos como ahora contaré. Pero en general, merece el tiempo que le vayas a dedicar.
Tercera temporada de Hannibal: un cambio inesperado
La temporada 3 de la serie Hannibal es sin duda alguna marcadamente distinta de las otras dos temporadas.
Personalmente a mi se me antoja que ha sido un poco (o bastante) de relleno y poco o nada aporta a la trama principal en realidad.
Es evidente que la historia ha sido ampliamente supeditada a lo visual, lo cual es para mi un error y me alegro que hayan decidido terminarla en la tercera y no postergarla en lo que hubiese supuesto una lenta agonía.
Sin embargo, y para ser justos, he de decir que la fotografía de a tercera temporada de Hannibal es cuasiperfecta. Cada plano, cada escena, cada episodio, ha sido tratada con denodado esmero por parte del director y el resultado es fácilmente palpable.
Tan palpable que hasta yo me he dado cuenta.
Desgraciadamente para mi soy de los que piensan que la historia ha de ser lo más importante y confieso mi carencia de dotes necesarias para apreciar la belleza artística como Dios manda.
Conclusión: varias veces por capítulo pasaba la serie en fast forward, lo que viene siendo el botón del ff, o como dice mi madre «pasarlo rápido palante», porque aparte de estéticamente muy trabajadas son exageradamente lentas y cuando llevas unas pocas, si eres de mi escuela, te acaba aburriendo.
Aunque como digo, es un impecable trabajo de fotografía, de hecho de los más destacados que haya visto nunca.
Lo cortés no quita lo valiente.
Respecto al argumento, pues un poco de aquí, un poco de allá, un poquito de perejil, buen aceite de oliva, y nos sale una temporada que no se sabe muy bien de donde viene ni a donde va, y que da como resultado poco más que un tributo a los anteriores trabajos en sus diferentes formatos de Hannibal el Canibal.
Poco más que añadir.
En resumen: Temporadas 1 y 2 Bien / Temporada 3 Flojita
Sin embargo, y teniendo en cuenta los puntos débiles ya nombrados por mi persona en las lineas anteriores, te sigo recomendando ver la serie Hannibal.
En mi opinión, la serie de Hannibal en general se asemeja a como su protagonista prepara los suculentos platos que prepara en particular. Con esmerado cuidado y mimo, se nos presenta una serie en bandeja de plata que cuando uno se para a pensar detenidamente en los ingredientes que conforman el todo, no sabe si abalanzarse sobre el o ponerse a vomitar.
Por cierto, si te interesa la cocina te invito al interesante artículo que ha escrito Mariló García sobre la derivada gastronómica de la serie que no es algo menor ni mucho menos.
Sea como fuere, estoy seguro que Hannibal no te dejará indiferente y bien merece la pena al menos empezarla.
Si así lo haces ya sabes que tus opiniones cuentan y eres más que bienvenid@ a compartir tu parecer sobre el menú que propone la serie de Bryan Fuller.